Hace menos de un mes veíamos a un Iván Ferreiro, en solitario con su teclado, presentando Confesiones de un Artista de Mierda en Fnac y salíamos de allí con ganas de un concierto completo, cosa que nos hizo alegrar el doble al ver el cartel del Festival Acróbatas. Por eso nos vamos al Hospitalet, el mismo día que este recibe al Barça, pero para dirigirnos al Teatre Joventut, espacio que en nuestra última visita nos regaló un impresionante show con el Rooom de Standstill, la cosa promete.
Con un escenario sencillo y una única luz tenue empezó el concierto de Iván Ferreiro, el cual repasaría principalmente temas de sus dos últimos discos Confesiones de un Artista de Mierda y Picnic Extraterrestre. Entre bromas sobre una concentración que le hacía olvidarse del público y la evolución de los gustos sobre las copas con los años fue pasando el concierto. Más tarde le pudimos ver acompañado por Amaro Ferreiro y Emilio Saiz que con sus guitarras hicieron que el público se animara incluso a dar, en más de un tema, palmas (si, de esas que a veces nos llegan a parecer innecesarias en un teatro).
En el 'setlist' pudimos encontrar temas como Ciudadano A, Paraísos Perdidos, Canciones para el Tiempo y la Distancia, Jet Lag, Santa Adrenalina, una versión de 1999, Años 80, M o Turnedo.
Entre las sorpresas de la noche destacamos las apariciones de Shuarma y su bajista para interpretar El Viaje de Chihiro y un final de concierto con Santi Balmes, de Love of Lesbian, que acompañó a Ferreiro en El Equilibrio es Imposible dónde pudimos ver una complicidad auténtica y que emocionó a muchos.
¿Resumen de la noche? Un concierto excelente, un Iván Ferreiro que nunca defrauda, mucha emoción a flor de piel y odio intenso a todos aquellos que usan flash en los conciertos.
k.
k.
No hay comentarios:
Publicar un comentario